miércoles, 8 de agosto de 2012

Vida plácida junto al río Francolí: mausoleo y villa romana de Centcelles


El mausoleo y la villa romana de Centcelles (en el municipio de Constantí) se encuentra a unos siete kilómetros de la ciudad de Tarragona, muy cerca del río Francolí. Es uno de los monumentos romanos conservados más importantes de los Países Catalanes y de la península Ibérica, con mosaicos de excepcional valor.

El lugar fue ocupado, durante el alto imperio, por una gran villa romana, la cual fue reconstruida completamente en el siglo IV dC; de este periodo también datan las termas romanas. Posteriormente se construyó un mausoleo, el cual fue aprovechado durante la Edad Media como capilla dedicada a San Bartolomé y luego como casa de campo hasta 1958.

La importancia del edificio radica en este mausoleo levantado a mediados del siglo IV. Su cúpula presenta un revestimiento de mosaicos con escenas de caza, representaciones del Antiguo y del Nuevo Testamento, de las cuatro estaciones y de personajes entronizados. Es, en conjunto, un monumento clave de la arquitectura paleocristiana.

Vista de las termas romanas © Domènec Ribes Mateu

El mausoleo y villa romana de Centcelles fue declarado en 1931 monumento histórico y artístico, y actualmente forma parte del Conjunto Arqueológico de Tarraco, reconocido como Patrimonio Mundial por la UNESCO.

El edificio que podemos ver hoy día se levanta en un lugar donde antiguamente había habido una villa romana, probablemente desde el siglo II aC. La gran sala de planta circular, conservada íntegramente, fue convertida, ya en época medieval, en una iglesia dedicada a San Bartolomé.

Las construcciones conservadas precariamente que podemos observar en la panorámica del exterior de Centcelles, parcialmente protegidas por una cubierta, constituyen dos conjuntos termales que constan de salas con pequeñas piscinas de agua caliente y fría.


Panorámica de los mosaicos de la sala de la cúpula © DRM

Este es el espacio más emblemático de Centcelles y el que ha dado fama al mausoleo. La cúpula de mosaicos muestra diferentes representaciones, divididas en tres niveles, que hoy día se consideran como una de las representaciones artísticas paleocristianas más importantes de todo el mundo romano:

  • En la franja inferior podemos observar una escena de caza, de la que solo se conservan algunos jefes, entre ellos el del dominus (el propietario o señor) al que posiblemente estaba dedicado el monumento funerario. Aparecen diferentes personajes relacionados con la caza (hombres con redes, jinetes, ayudantes con caballos...) y varios animales (ciervos, perros y un jabalí). También aparece un grupo de edificios que podría ser una villa romana.
  • En la franja central encontramos varias escenas del Antiguo y el Nuevo Testamento: las figuras de Adán y Eva, el Buen Pastor, el Arca de Noé, la resurrección de Lázaro, la escena en que unos judíos se niegan a adorar el ídolo de Nabucodonosor, Jonás descansando bajo una calabaza, etc.
  • En la franja superior se representan las cuatro estaciones del año con unos personajes que llevan una fruta o una planta típica de la estación que representan. También podemos observar, aunque parcialmente, unas escenas donde aparecen personajes sentados en tronos.


Vista de la sala interior del mausoleo © DRM

La villa romana de Centcelles era un edificio de unos 90 metros de longitud que contenía unas 21 estancias que se alineaban hacia el sur. Posiblemente también había un pórtico, del que hoy día no queda ningún vestigio.

En el interior del edificio encontramos dos estancias de planta central. Una está coronada por una magnífica cúpula decorada con mosaicos, que la hacen única en Cataluña. La otra sala es la que podéis observar en esta panorámica: es un espacio de planta cuadrilobulada que, desgraciadamente, ya no conserva su cubierta original.

¿A quién iba destinado este singular monumento romano? Esta es una de las preguntas que genera más quebraderos de cabeza a los investigadores. La teoría más aceptada es que se trata de una tumba monumental o mausoleo dedicado a un dominus, tal vez un emperador romano o bien algún obispo o miembro de la alta nobleza de la época.

jueves, 26 de abril de 2012

El Pabellón de los Distinguidos de Reus en detalle (o cómo cuidar de pacientes selectos)


El pabellón número 6 del Instituto Pere Mata de Reus (Baix Camp, Tarragona) se conoce como Pabellón de los Distinguidos porque estaba destinado a acoger enfermos mentales de alto poder económico de la burguesía de principios del siglo XX. Quien lo visite verá que los pacientes que lo habitaban podían disfrutar de unos niveles de confortabilidad poco usuales para esa época: radiadores en las habitaciones, colores y decoración pensados para transmitir sensación de placidez y tranquilidad a los pacientes, rejas exteriores robustas pero al mismo tiempo disimuladas y discretas que dejan entrar la luz exterior, etc.

Este edificio, que formaba parte de un complejo más amplio, estaba reservado solo para hombres. Constaba de una planta baja destinaba al ocio (con la sala de música, sala de juegos y comedor) y dos pisos con las habitaciones de los internos.

© Domènec Ribes i Mateu 

El Pabellón de los Distinguidos se erige como un compendio de pequeños detalles que el arquitecto Lluís Domènech i Montaner planificó, ideó y diseñó para hacer la vida de los pacientes más fácil y cómoda.

Por ejemplo, llama la atención la ausencia total de esquinas puntiagudas en todo el recinto con el fin de evitar accidentes entre los pacientes: las escaleras y las barandillas son redondeadas, y los elementos rompibles como cristales son mínimos.

© Domènec Ribes i Mateu  
© Domènec Ribes i Mateu  

También es omnipresente el uso de colores cálidos y de materiales como la madera, que transmiten serenidad y placidez.

En la decoración del pabellón predomina por encima de todo temas vegetales y, en menor medida, de animales. Tratan de ser una alegoría sobre la curación de los enfermos internados. También son bastante frecuentes los símbolos heráldicos catalanes y los temas medievales, sobre todo en la decoración de vidrieras.

© Domènec Ribes i Mateu  
© Domènec Ribes i Mateu  

El Instituto Pere Mata fue creado como una pequeña ciudad (tenía una superficie de unas veinte hectáreas) bajo unos conceptos renovados de urbanismo, ornamentación, materiales y planificación de los espacios. Y los criterios que rigieron la distribución de los espacios fueron los de género, categoría social y tipo de enfermedad.

© Domènec Ribes i Mateu  

Lluís Domènech i Montaner fue capaz de idear un edificio que combinaba de manera perfecta una decoración exquisita propia del modernismo con la preocupación por la seguridad, el confort y la higiene de unos pacientes distinguidos y selectos.

Aquí podéis ver una visita virtual al Pabellón de los Distinguidos del Institut Pere Mata.

Desde 1997 el Pabellón de los Distinguidos forma parte de la Ruta del Modernismo de Reus, y las visitas públicas son gestionadas por el Patronato Municipal de Turismo y Comercio de Reus.

Dirección: Carretera de l’Institut Pere Mata, s / n. Reus

viernes, 9 de marzo de 2012

El arte de la piedra en seco (2): la barraca del Man en la Plana del Alt Camp (Tarragona)

Situada en las Planes del Pont d’Armentera (comarca tarraconense del Alt Camp), en uno de los puntos con mayor concentración por kilómetro cuadrado de construcciones de piedra seca de todo el país, la barraca del Man es una de las más grandes y espectaculares. Quizás no rivaliza en cuanto a belleza y armonía de formas con la barraca del Manilles (la más estilizada, hermosa y bien cuidada de la comarca), pero sus dimensiones, la disposición de sus estancias y los elementos singulares que contiene la hacen especial y única: un suelo empedrado, un pesebre esculpido en el suelo y un sistema de recogida del agua de la lluvia para llenar la cisterna.

Interior de la estancia, con el suelo empedrado

Detalle del comedero
Se trata de una construcción aérea aislada de forma gemela-compuesta, con un tipo de puerta de arco plano. Está compuesta por cuatro estancias: dos en la parte NE que se comunican entre sí, otra en la parte SE y finalmente una pequeña al oeste.

La principal contiene un pesebre y una cisterna, la que comunica con ésta tiene una característica que la hace singular y casi única: tiene todo el suelo empedrado y unas pequeñas aberturas en las paredes para dejar entrar la luz. La estancia de la izquierda tiene otro pesebre para los animales esculpido en la roca madre.

Por último, la pequeña estancia trasera tiene un pequeño banco y una apertura para controlar el paso del agua proveniente del exterior y que permite desviarla hacia la cisterna del campesino o hacia el abrevadero de los animales.

La pared frontal está rematada por un sardinel y en el exterior tiene una escalera para subir a la parte superior. Junto a la barraca hay una antigua era de trillar.

Según la tradición popular, era una de las barracas que tiempo atrás habitaban los carboneros y los pastores que trabajaban para el monasterio vecino de Santes Creus.

Planta de la barraca del Man (© Drac Verd de Sitges)

Cisterna en el interior de la barraca del Man

Panorámica del interior: cisterna, comedero y puerta de acceso a la otra estancia

miércoles, 29 de febrero de 2012

El arte de la piedra en seco (1): la barraca del Manilles en la Plana del Alt Camp (Tarragona)

Visita virtual a la Barraca del Manilles, en la Plana del Alt Camp

La zona de las Planes del Pla de Santa Maria, el Pont d’Armentera y Santes Creus (provincia de Tarragona) es quizás la región de nuestro país que más construcciones de piedra seca concentra por metro cuadrado. Sólo con dar un vistazo a la web Wikipedra y seleccionar esta zona, veréis dibujados en el mapa centenares de barracas y construcciones de piedra seca. 

Interior del aposento del payés 
Tras la restauración que se llevó a cabo durante el 2006 gracias a la Fundación Territori i Paisatge de Caixa Catalunya y el Centro Excursionista de Catalunya, la que se conoce como barraca del Manilles probablemente se haya convertido en una de las construcciones de piedra seca más bellas, no sólo de esta zona sino de toda Catalunya. 

Y no lo decimos porque sí. Esta magnífica barraca presenta un buen número de elementos que la convierten en una construcción especial y diferente: en la parte posterior veréis un gran espacio, excavado en la roca y situado debajo del nivel de tierra de la barraca. Su finalidad es incierta: ¿un aljibe? ¿un escondrijo? Según Manel Tosas, gran conocedor de las construcciones de piedra seca de esta parte del país, se trataría de un espacio donde se guardaban a remojo las portadoras de sulfato de cobre que los payeses usaban para sulfatar las viñas. Sea como sea, es un espacio muy particular que nunca antes había visto en ningún otro lugar. 

Otro elemento curioso de esta barraca son las escaleras exteriores que permiten acceder a la gran terraza superior, donde según se cuenta hay dos escondrijos (yo no los he podido encontrar). Desde aquí arriba tendréis una fabulosa vista de esta parte de las Planes de Santes Creus, con otras construcciones de piedra seca desperdigadas aquí y allá. 

Planta de la Barraca del Manilles (© Drac Verd de Sitges) 

La barraca está compuesta de dos aposentos destinados a separar los animales de las personas. El espacio que ocupaba el payés impresiona por los 4,3 metros de altura de su cúpula. Es un espacio magnífico que contiene una cisterna y diferentes hornacinas. También encontraréis un pequeño espacio empotrado en la pared, que bien podría tratarse de un pequeño establo, un lecho para el payés o simplemente una chimenea. 

Canalón excavado en la roca que conduce a la cisterna 

Comedero y pica del establo 

La construcción es de forma gemela-compuesta y con puerta de arco de medio punto. Aquí podéis ver la panorámica virtual de la barraca del Manilles que hemos preparado para el portal Panorama.cat

El entorno de la barraca está perfectamente conservado gracias al trabajo de Jaume Sendra, el Manilles, el vecino del Pont d’Armentera que actualmente es su propietario.

Tanto la barraca como el entorno estan perfectamente conservados